¿Se puede cerrar un stent?
Los stents sí pueden cerrarse, aunque no suele ocurrir.
Los stents no son infalibles y pueden fallar, y por lo tanto cerrarse dejando de realizar su función y volviendo a bloquear la arteria.
Un stent se puede cerrar debido a muchos factores, desde un fallo del stent al avance de la enfermedad coronaria por más acumulación de colesterol en las arterias..
Con las mejoras en la tecnología y los tratamientos mejorados cada vez los stenst se cierran menos, sin embargo se considera de forma aproximada que el 1% de los stents se podrían cerrar en algún momento de forma brusca causando una trombosis aguda del stent y provocando un infarto agudo de miocardio.
Si esto ocurre suele producirse principalmente en el primer año desde que se pone el stent. Transcurrido el primer año, persiste un riesgo de entre el 1 al 2% anual de que el stent se estreche poco a poco (reestenosis del stent). En estos casos es común que provoque angina de pecho.
Cuando un stent se cierra puede colocarse otro nuevo stent, incluso dentro del que se ha cerrado para volverlo a abrir.