¿Se puede correr con un stent?
Sí, por norma general se puede correr con un stent.
Pasada la recuperación tras el implante de un stent sin complicaciones, la mayoría de los pacientes pueden hacer vida normal. Por lo tanto, con un stent se puede correr, siempre que su médico no lo contraindique por cualquier otra causa.
Aunque dependerá de cada caso concreto, la medicación que se toma suele hacer que la sangre esté más líquida y por ello se debe tener especial cuidado con los golpes ya que se aumenta el riesgo de hemorragias. Aunque correr tampoco sea un deporte de riesgo, es recomendable tener cuidado.
En cualquier caso, es importante dejar de correr si se notan síntomas como dolor de pecho o falta de aire.