No, el picante en sí no sube ni baja la tensión arterial.
Los alimentos por ser picantes no tienen que afectar a la tensión. Lo relevante es entender qué es lo que está resultando picante ya que hay alimentos picantes que pueden subir la tensión y otras que no.
El picor no es lo que sube la tensión sino que son los alimentos específicos los que hacen subir o no la tensión. Por lo tanto, el picante no está desaconsejado en una dieta para la hipertensión como norma general.
El curry, la pimienta, la mostaza, la guindilla o los chiles naturales sin sales añadidas no tienen ningún efecto negativo para la tensión arterial. De hecho pueden ser un buen sustitutivo a la sal para potenciar el sabor.
Sin embargo, como norma general, las salsas picantes y productos industriales (tipo salsa tabasco o BBQ) se suelen desaconsejar ya que suelen tener un alto componente en sal, que es lo que sube la tensión arterial y no el picante.