Bradicardia y deporte

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Relación entre bradicardia y deporte

La bradicardia es una arritmia en la que el corazón late a menos de 60 pulsaciones por minuto. Sin embargo, hay situaciones en las que, dadas las características físicas o la edad de la persona, las bradicardias son normales.

Muchas personas jóvenes, sanas y que practican deporte con regularidad suelen presentar bradicardias en estado de reposo. Esta bradicardia en deportistas se conocen como bradicardia sinusal.

Las bradicardias son normales en personas deportistas.

El deporte y entrenamiento generan cambios adaptativos en el sistema cardiovascular. El grado y repercusión será acorde a la intensidad del entrenamiento y del tipo de deporte. Tener bradicardia no es malo necesariamente.

Aunque es habitual que el deporte produzca bradicardias, no suele ser habitual que el corazón lata a menos de 40 pulsaciones por minutos. Se llama bradicardia extrema cuando el corazón va a menos de 40 latidos por minuto. Sin embargo, cuando dormimos la frecuencia cardíaca baja, por eso tampoco es tan raro que se produzcan taquicardias extremas en deportistas mientras están durmiendo.

¿Por qué se los deportistas tienen bradicardia?

Como normal general, el corazón del deportista puede aumentar un poco el espesor de sus paredes, lo que se traduce habitualmente en un aumento de los voltajes del electrocardiograma.

Al respecto de la frecuencia cardíaca, los corazones adaptados a esfuerzos físicos importantes habitualmente presentan bradicardia sinusal en reposo.

En deportistas entrenados en algo muy común que el corazón lata a menos de 60 pulsaciones. Se podría explicar de forma sencilla como que se producen bradicardias en deportistas ya que su corazón es tan potente que con menos latidos por minuto consigue mantener el flujo de sangre que su cuerpo necesita.

Botón analizar frecuencia cardíaca

Síntomas de las bradicardias por deporte

Las bradicardias comunes en deportistas no revisten mayor gravedad ni tienen mayor trascendencia. En general, las bradicardias sinusales son asintomáticas.

En caso de que se produzcan algún tipo de síntomas como desmayos o mareos, debe acudirse a valoración por parte de un cardiólogo ya que puede que el motivo de la arritmia sea otro.

¿Cuánto dura la bradicardia de deportista?

La bradicardia del deportista es el ritmo normal del corazón de los deportistas, por lo que dura todo el tiempo que esté en reposo, es decir, sin realizar esfuerzos o deporte que requieran que el corazón bombee sangre más rápido.

Aunque depende de la intensidad del entrenamiento, a partir de los 14 días de entrenamiento intenso y enfocado en resistencia el corazón comienza a adaptarse y comienza a latir progresivamente más lento. Sin embargo, es habitual que la bradicardia desaparezca al poco tiempo de dejar de realizar deporte con regularidad e intensidad.

Riesgos de las bradicardias en deportistas

En general, la bradicardia del deportista no tiene riesgos asociados, si bien, siempre hay situaciones que se pueden producir que se salgan de la normalidad y que pueden requerir evaluación por parte de un cardiólogo.

Es relativamente común que los deportistas en reposo también presenten bloqueo auriculo-ventriculares de 1º grado o de 2º grado (y Mobitz 1). Si bien, aunque estas entidades son algo bastante común en personas jóvenes y sanas durante el sueño o situaciones relajadas, es preciso una valoración completa por parte de un cardiólogo para poder aclarar si son o no benignas en cada persona en concreto.

La mejor forma para medir las bradicardias es a través del electrocardiograma. Hoy en día hay multitud de dispositivos personales como pulseras y relojes inteligentes, muy comunes entre deportistas, que monitorizan la actividad del corazón con relativa fiabilidad. Sin embargo, es muy recomendable que los resultados de estas mediciones de smartwatch y otros dispositivos sean siempre interpretados por cardiólogos.