Una presión arterial en 14 10 no es normal. Una tenisón 14 10 es hipertensión arterial..
- Tensión sistólica (máxima): 140 mmHg. Es justo el valor límite a partir del que se considera tensión alta.
- Tensión diastólica (mínima): 100 mmHg. No es normal. Hay una clara hipertensión diastólica.
¿Es normal una tensión 14 10?
No, una tensión 14 10 no es normal, ya que tener significa hipertensión grado I. La tensión sistólica está en los límites para considerarse hipertensión, pero la diastólica está marcadamente elevada.
Lo común en personas sanas y jóvenes es que la tensión normal se encuentre entre los siguientes valores:
- Tensión máxima normal: entre 100 y 140. Así, 140 es el límite de lo considerado normal.
- Tensión mínima normal: Por debajo de 90.
Así pues, no es bueno tener una tensión arterial de 140/100. Esa presión dentro de las arterias va lesionándolas poco a poco, lo que aumenta las posibilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares como infarto de miocardio o ictus.
Además de la hipertensión, el riesgo se ve aumentado con el colesterol elevado, la diabetes o el consumo de tabaco.
Como resumen, una tensión de 14/10 requiere ser analizada y controlada, para controlar la hipertensión y evitar que se agrave.
Síntomas asociados a tensión 14/10
Aunque muchas personas con tensión de 140/100 pueden no notar nada, algunos síntomas habituales de la hipertensión son:
- Dolor de cabeza, más o menos fuerte.
- Mareos en algunos casos.
- Dolor en la zona del pecho, como una molestia fuerte.
- Latidos fuertes.
- Sangrados por la nariz.
- Dificultad y esfuerzo para respirar.
El hecho de que muchas veces no cause síntomas hace que la hipertensión sea una enfermedad muy peligrosa, ya que puede pasar años dañando a las arterias sin que nos demos cuenta. Por eso es imprescindible vigilar la tensión de vez en cuando.
Recomendaciones y tratamiento para la tensión 140 100
El tratamiento de la tensión 14 10 debe comenzar con hábitos de vida saludables. Es importante adquirir los siguientes hábitos:
- Reducir el consumo de sal.
- Evitar el estrés.
- No fumar.
- Hacer ejercicio físico con regularidad.
- Mantenerse en forma en un peso saludable.
En todas las personas hipertensas es recomendable una valoración cardiológica, que incluya al menos las siguientes pruebas:
- Electrocardiograma: donde muchas veces se ven voltajes aumentados debidos a la hipertrofia del músculo cardíaco que provoca la hipertensión.
- Un ecocardiograma-doppler, para valorar la estructura, forma y funcionamiento del corazón y sus válvulas. Es habitual que los pacientes hipertensos presenten algún grado de miocardiopatía hipertensiva, que consiste en que las paredes del corazón se vuelven más gruesas y el músculo un poco más rígido. También se puede ver dilatación de la raíz de la aorta o de las aurículas.
Existe también una gran variedad de tratamientos farmacológicos para la hipertensión. Los tratamientos más habituales para la hipertensión arterial son:
- IEACAS (Inhibidores de la Enzima Convertidora de la Angiotensina).
- ARA II (Antagonista de los receptores de la angiotensina II).
- Antagonistas de los canales del calcio.
- Diuréticos.
- Diuréticos ahorradores de potasio.
- Betabloqueantes.
- Alfa bloqueantes.
Solo un médico puede recetar estos medicamentos para el control de la tensión arterial. No se automedique.
También existe un tratamiento invasivo novedoso (llamado denervación renal) que consiste en la eliminar mediante un cateterismo unos los nervios del riñón, que se encargan de subir la tensión arterial. Los ensayos muestran resultados prometedores, pero todavía no es una técnica estandarizada.